domingo, 15 de abril de 2012

14 de ABRIL: REPÚBLICA INDEPENDIENTE DE IBÁÑEZ

Ayer sábado, como cada 14 de abril, los medios de comunicación se hicieron eco del día de la República. Fieles a la actualidad, hemos querido hacer un repaso de las menciones que Francisco Ibáñez ha hecho en su obra de la II República.

Siendo más concretos, lo cierto es que Ibáñez no habla directamente de la República, pero sí de los republicanos.La primera mención que tenemos de ellos aparece en el cómic El 35 aniversario (1992), en el que Ibáñez cuenta su vida en clave de humor y, dado que nació en 1936, no es de extrañar que dibuje a varios miembros del ejército republicano persiguiendo a un sacerdote. Estamos, claro está, en plena Guerra Civil Española.

Más recientemente, Ibáñez caricaturiza a un soldado republicano que ha permanecido durante más de setenta años en una vieja trinchera aprovechada por la TIA como pasadizo secreto.Esto se aprecia en Eurobasket 2007 (2007). El anciano soldado está "acompañado" de un difunto camarada, llamado Rojíllez.

Sin embargo, la aparición más memorable de los republicanos en un cómic de Mortadelo y Filemón la tenemos en Siglo XX...¡Qué progreso! (1999), aventura en la que Mortadelo casi es fusilado por los republicanos en plena guerra civil, mientras que a Filemón le ocurre lo propio en el bando fascista.

                             


La caracterización de ambos frentes es delirante: el líder republicano aparece vestido de rojo y porta una pistola vieja y un hacha, a la vez que es secundado por un campesino simbólicamente portador de una hoz. Su ejército, con la vestimenta típica, lleva trabucos y sierras. Por su parte, el líder del bando nacional es un orondo militar con pistola y sable, acompañado de un capitalista ricachón que, puro en mano, presenta una nariz de gorrino. Los soldados del bando nacional parecen más disciplinados y mejor armados, e incluso se sirven de tanques, en lugar de la cabra que llevan los republicanos.

Nótese el paralelismo entre ambas escenas, propio de un autor como Ibáñez que siempre ha preferido no mojarse políticamente.Dicho paralelismo abarca tanto la composición gráfica de ambas viñetas como los diálogos, que reproducen un mismo esquema. Y es que el humor de Ibáñez no pretende cambiar el mundo, tampoco tiene como objetivo principal criticar (aunque es, a menudo, un humor crítico). Nuestro dibujante se contenta con la recreación jocosa de la realidad, explotando los tópicos y exagerándolos, creando un clima de hilaridad que trasciende a cualquier ideología maniquea, incapaz de ofender a cualquiera con un mínimo sentido del humor.

En eso consiste el humor de Ibáñez. Sin más lecturas.

Saludos, amigos.

6 comentarios:

Raw dijo...

Las escenas de Siglo XX, qué progreso son buenísimas. Ahí demuestra una vez más Ibáñez que hace humor para todo y con todos.

Chespiro dijo...

Cierto. Para mí, es lo mejor de un álbum que, al margen de la gran factura gráfica, no me acaba de gustar.

Easmo dijo...

Iba a poner algo pero esas últimas lineas en negrita resumen mi opinión. Bravo.

Chespiro dijo...

Gracias por el comentario, amigo. Un saludo.

maginelmago dijo...

Y lo que muestra no es erróneo: el ejército de Franco estaba mejor pertrechado que el republicano.

Chespiro dijo...

Entre broma y broma...riguroso documento histórico, amigo.